Por que será?

Por que será que siempre que escribo, es para desahogarme de cosas mas o menos tristes, o complejas, o existencialistas?... Eso deja la impresión (lo notara cualquiera que lea los post anteriores) de una vida triste, terrible, casi en el borde del existencialismo constante, digna de Nietzche...

Pero la verdad es que no es así, es solo que de cuando en cuando salen de mi letras y palabras que expresan sentimientos negros, como una terapia, para expulsarlos, para que no vivan siempre conmigo.

Además de esa forma también es posible que otras personas puedan saber que no solo únicos a quienes les ocurren estas cosas y, quien podría negarlo, quizás hasta alguien se interese en contactarnos y conversar un poco mas sobre lo mismo.

En fin, here we are again... y obviamente con un sentimiento raro. Es que se siente mal cuando nos toca salir de la burbuja y conocer una realidad distinta a la que pensábamos. Cuando vemos que la persona que creíamos nos miraba a nosotros, o que queríamos nos mirara solo a nosotros, en realidad tiene ojos para mirar a todo el mundo. Es verdad, lo se, se que muchos lo dirán: todos tenemos ojos para mirar a todo el mundo; pero no negaremos que en nuestro fuero interior, en nuestra esencia de persona aun no lo suficientemente evolucionada, nosotros quisiéramos esos ojos exclusivamente para nosotros y en esa fantasía tan avanzada hasta pretendemos vivir en aquel castillo de arena.

Pero la marea siempre llega y, también es verdad, muchas de esas veces el agua es demasiado fría. Pero así es el océano, el que quiera, que aprenda a nadar y caliente el cuerpo, pues el agua jamás cambiara su temperatura. El que no, simplemente déjese llevar por la corriente, cierre sus ojos y prepárese a morir de hipotermia....o quien sabe, quizás se ahogue antes.

Cuando por las calles paso...

En ocasiones me pasa, son temporadas; ciclos. A veces siento las ganas de hablar, de escribir, de expresar un millón de cosas, pero finalmente todo se aglutina en la puerta de salida y entorpece el desembarco de palabras. Finalmente solo me quedo mirando y pensando cosas que jamás diré.
Cuando adolescentes sentíamos que la vida estaba dispuesta para nosotros, todas las puertas estaban disponibles y listas para ser abiertas (ya fuera por la razón o la fuerza). Éramos dueños de nuestro propio destino, éramos responsables de nosotros mismos, no debíamos rendir cuentas a nadie (salvo algunas cosas practicas, propias de la sana convivencia a costa de nuestros padres) y hasta estábamos autorizados a fallar y cometer errores.
A medida que vamos madurando, creciendo, vamos tomando mas compromisos y responsabilidades, y eso implica que nuestros actos ya no son tan libres, pues las consecuencias no solo las asumimos nosotros mismos, sino que afectan a otras personas y, lo que es peor, afectan a personas que nos importan.
Aunque el balance de lo recorrido puede ser positivo, no podemos negar que hoy en día la vida se nos ha tornado mas compleja y, quizás si hasta mas existencialista, que en nuestros apasionados días de adolescencia. Eso es agotador.
En fin, esta es una reflexión superficial, escrita frente a una pantalla y una taza de café, probablemente en un intento desesperado por desatorar la vía de escape para la expresión de los pensamientos.